"Educación integral para la vida"
INCORPORADO A LA SEP 09050550
Algunos aspectos que caracterizan el enfoque pedagógico son:
1 Se respeta el nivel y ritmo de desarrollo del niño. Forma al niño para enfrentar los cambios y retos de la vida.
2 El niño aprende haciendo, usando sus manos, trabajando, por medio de la exploración, investigación e interacción con su medio ambiente, de ahí surge la educación liberadora sin necesidad de reprimendas.
3 Por medio de la libre elección es que el niño llega a la toma de decisiones y a responsabilizarse de sí mismo y de su sociedad.
4 El hombre se desarrolla a través de la actividad psíquica, mental y física, como un ser completo, la educación debe ser integral no alineante. No hay cuadernos, tampoco tareas, ni planas de caligrafía.
5 El niño utiliza el trabajo como fuente de energía creadora, para construirse a sí mismo, el adulto lo utiliza para construir su sociedad.
6 El control de error se encuentra en el material, el niño desarrolla conciencia del mismo sin necesidad de reprimendas.
7 Entendemos la imaginación como una tendencia creativa del hombre, es la tendencia hacia la abstracción, parte de la realidad y permite al niño hacer una aportación útil al grupo. La fantasía, por el contrario, encierra al hombre en sí mismo; cuando no se le ofrecen las experiencias reales, el niño se aisla y utiliza éstas para escapar, retardando su integración al grupo y limitando sus capacidades de participación.
8 El énfasis está en la cooperación y no en la competencia. Por eso cada niño tiene su propio ritmo.
9 Es muy importante la integración de los padres en el proceso educativo de sus hijos.
10 Se desarrolla la autonomía y la independencia como medio para que el niño desarrolle iniciativa, confianza en sí mismo y auto-disciplina, características que necesita toda persona para sobrevivir en una época de cambios.
En todas las actividades en el ambiente, se respeta el ritmo individual de cada niño y la interacción del grupo.
1 Movimiento. Los niños aprenden más cuando se les permite moverse, el movimiento está vinculado al desarrollo intelectual.
2 Trabajo. Los niños están dispuestos a trabajar por naturaleza, sin que se les obligue a hacerlo. El niño trabaja transformándose a sí mismo.
3 Repetición. Al niño le encanta repetir espontáneamente. La repetición le muestra al niño que su ambiente es consistente y le permite consolidar sus destrezas.
4 Felicidad. Satisfacción en el trabajo realizado y confianza en sí mismos.
5 Concentración. El niño desarrolla la concentración por medio del trabajo. Los materiales de Vida Práctica propician la concentración en el niño, son atractivos para él porque los ha visto en casa y no siempre le permiten participar. Como efectos colaterales tenemos un cambio de actitud, el niño cambia su comportamiento cuando logra la concentración, nace el afecto hacia la Guía, quien lo introduce a estas actividades, empieza a crear lazos afectivos con sus compañeros que comparten las actividades o se ven beneficiados con su ayuda, el niño se vuelve más tratable y "bien portado", aumenta la autoconfianza al reconocer sus logros, mejora la socialización, el niño logra la "normalización".
6 Orden. Los ritos que se van aprendiendo en el Ambiente Montessori, le dan seguridad al niño porque le permite prepararse para la actividad y predecir lo que puede suceder.
